Si las computadoras de nuestras casas fallan luego de un par de años, pues con mayor razón lo harán aquellas que están en el espacio desde 1990. En estos momentos, la NASA se encuentra haciendo esfuerzos para poner en funcionamiento la computadora del telescopio espacial Hubble, que desafortunadamente, permanece fuera de línea.
De acuerdo con la agencia espacial, los especialistas no lograron conectar el módulo de memoria de respaldo, por ese motivo, el observatorio aún no puede reanudar sus observaciones científicas. En un futuro cercano, esperan establecer la verdadera causa de la falla de la computadora de carga útil a bordo, la cual llevó al telescopio a entrar en modo seguro.
La falla
Los problemas con el telescopio surgieron el 13 de junio de 2021, cuando la computadora a bordo NSSC-1 (NASA Standard Spacecraft Computer-1), responsable de administrar y coordinar el funcionamiento de los instrumentos científicos, dejó de responder a los comandos enviados por la computadora principal.
Esto provocó que el telescopio cambiara su sistema a “modo seguro”, como lo harían las computadoras que tenemos en casa. Más tarde, el 14 de junio, los especialistas reiniciaron la computadora, pero pronto volvió a fallar. “El comando para iniciar el módulo de respaldo no se completó”, explicó la NASA en una publicación.
Inicialmente, se creyó que el origen de la falla era un defecto en el módulo de memoria de la computadora, así que se decidió cambiar a uno de respaldo. Sin embargo, cuando los ingenieros intentaron probar esto el 16 de junio, el telescopio no ejecutó el comando para iniciar el módulo de respaldo, y lo mismo ocurrió al día siguiente.
No todo está perdido
El equipo del telescopio no ha parado de analizar todos los datos disponibles para determinar la causa de la falla de la computadora. Las observaciones científicas a través del telescopio se reanudarán solo después de haber resuelto el problema.
Al mismo tiempo, el telescopio está equipado con otras dos computadoras NSSC-1, capaces de usar cualquiera de los cuatro módulos de memoria independientes, por lo que en un caso crítico, los especialistas cambiarán a otra computadora. Esto quiere decir que no todo está perdido para el observatorio de 31 años.
“El equipo de operaciones realizará pruebas y recopilará información sobre el sistema a fin de aislar aún más el problema”, escribió la NASA. “Los instrumentos científicos permanecerán en un estado de modo seguro hasta que se resuelva el problema. El telescopio en sí y los instrumentos científicos se mantienen en buen estado”.
Por lo tanto, es muy probable que el Hubble nos siga brindando información sobre el universo. Pero no será para siempre; eventualmente, sus partes se desgastarán, o su órbita se descompondrá, y los ingenieros necesitarán colocarlo en una órbita lo suficientemente baja como para que arda en la entrada atmosférica.
Lo bueno es que no será pronto. Por ahora no existe una fecha de finalización planificada para la misión Hubble. Esperamos poder disfrutar de sus contribuciones a la ciencia durante al menos algunos años más.