Los elefantes cautivos parecen estar sufriendo de un problema conocido por nosotros: el sobrepeso, pero su causa no sería la inactividad. Una investigación señala que los elefantes asiáticos (Elephas maximus) en cautiverio son tan activos como sus contrapartes salvajes. Los detalles fueron publicados en el Journal of Experimental Biology.
Comparativamente hablando, los elefantes asiáticos cautivos tienen menos grasa que el humano promedio y probablemente también caminan más. Por otro lado, aún está en debate si estos elefantes cautivos son más gordos que los salvajes.
Elefantes con sobrepeso
En el pasado, los estudios han clasificado a casi tres cuartas partes de todos los elefantes en los zoológicos de América del Norte con sobrepeso u obesidad. Sin embargo, estos puntajes generalmente solo se basan en observaciones visuales, lo cual puede ser engañoso.
Si bien los elefantes bajo cuidado humano pueden llegar a pesar más, no está claro qué cantidad de ese peso extra es grasa y cuál porcentaje se debe a comer en exceso o no hacer ejercicio. Tampoco está claro el efecto que tiene la grasa en su salud.
Daniella Chusyd, de la Universidad de Indiana, quería medir el contenido de grasa de los elefantes de una manera más directa. Durante su estadía en la Universidad de Alabama, decidió comparar la cantidad de grasa de los elefantes cautivos con algunos de sus problemas de salud.
Para eso, Chusyd y su equipo colocaron rastreadores de ejercicios a 35 elefantes asiáticos hembras y 9 machos de nueve zoológicos en EE.UU. y Canadá. Luego, alimentaron a los paquidermos con pan empapado en agua pesada (la cual contiene un isótopo natural de hidrógeno que ayudaría al equipo a medir el peso del agua de los elefantes).
Al rastrear su peso en agua a través de muestras de sangre regulares, el equipo pudo calcular los niveles de grasa total de los elefantes a partir de su masa corporal total.
Temores infundados
En los últimos años, algunos científicos se han preocupado por los elefantes que en cautiverio comen demasiado y no se ejercitan lo suficiente. Esta condición los pone en riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares, problemas en las articulaciones y anomalías en sus hormonas reproductivas, terminando por socavar su futuro.
No obstante, algunos de esos temores podrían estar fuera de lugar. Si bien los elefantes en cautiverio claramente no son tan saludables como lo serían en libertad, sus problemas de fertilidad pueden no deberse a la falta de ejercicio o grasa agregada.
En promedio, se encontró que los elefantes machos tenían aproximadamente un 8.5% de grasa corporal y las hembras aproximadamente un 10%. Para poner eso en la perspectiva de los mamíferos, un ser humano sano tiene entre un 6% y un 31% de grasa corporal.
Al comparar estos contenidos de grasa con otros problemas de salud en los elefantes asiáticos, los autores encontraron resultados inesperados. Los amables gigantes tenían una buena actividad física y quienes poseían un bajo peso eran los que sufrían para reproducirse. Las hembras infértiles tenían la menor cantidad de grasa.
Más estudios
Todavía no está claro si los elefantes asiáticos en los zoológicos están experimentando obesidad a una tasa mayor que en la naturaleza. Finalmente, la obesidad es extremadamente difícil de definir, incluso en humanos.
Es necesario realizar más investigaciones para determinar el nivel de grasa no saludable en los elefantes asiáticos y dónde se distribuye esa grasa, ya sea subcutánea o visceral. Este estudio sugiere que muchos de estos paquidermos en cautiverio están ejercitándose bastante y que una mayor cantidad de grasa corporal no parece ser problema.