Detectan ráfagas rápidas de radio en nuestra propia galaxia

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Detectan ráfagas rápidas de radio en nuestra propia galaxia

(ESO)

Un equipo de investigadores parece haber resuelto una de las preguntas que más nos han estado molestando durante los últimos años: ¿qué produce exactamente las ráfagas rápidas de radio (FRB)?

La investigación, dividida en tres estudios diferentes, se publicó en Nature.

Ráfagas rápidas de radio

Como su nombre lo indica, las FRB se manifiestan como un pulso de radio cuya duración varía desde una fracción de milisegundo hasta unos pocos milisegundos. Hasta ahora se cree que es causado por algún proceso astrofísico de alta energía que no comprendemos del todo.

Como comparación, se estima que las FRB liberan tanta energía en un milisegundo como el Sol en tres días. Sin embargo, a pesar de su origen energético, la “fuerza” de la señal que llega a la Tierra ha sido descrita como 1.000 veces menor que la de un teléfono en la Luna.

Ni siquiera sabíamos que existían hasta el 2007, pero desde entonces hemos catalogado cientos de ellas. Algunas provienen de fuentes que las emiten repetidamente, mientras que otras parecen producirlas una vez y quedarse en silencio.

Las características de las detecciones sugerían que estos provienen de objetos compactos. En este grupo encontramos a las estrellas de neutrones y agujeros negros. Casualmente, los magnetares, un tipo de estrellas de neutrones, eran los más sospechosos de todos.

Ahora, el nuevo estudio parece confirmar estas sospechas, ya que han observado a uno de estos objetos en nuestra propia galaxia enviando un FRB al mismo tiempo que emitía pulsos de rayos gamma de alta energía. Este recibió el nombre de SGR 1935+2154.

El estudio

A finales de abril de este año, SGR 1935+2154 entró en una fase activa, enviando una serie de pulsos de rayos gamma que fueron captados por el observatorio espacial Swift. Eso era completamente normal. Lo que no era normal es que varios observatorios de radio captaron una FRB precisamente al mismo tiempo.

Lo más notable es que anteriormente se han registrado estallidos de rayos gamma de SGR 1935+2154, pero no FRB. Esto nos indica que podría estar sucediendo algo que desconocemos.

Una posibilidad es que las FRB requieren un conjunto de condiciones que rara vez están presentes durante la producción de estos estallidos de rayos gamma. También es posible que sean disparadas desde su origen con una dirección específica, en lugar de que irradien en todas las direcciones. Lo último sugiere que solo podemos detectar aquellas que, casualmente, están orientadas hacia la Tierra.

Es importante resaltar que todavía hay algunas preguntas sobre si se trata de una FRB del tipo que hemos estado detectando desde el inicio. Esto se debe a la energía que presentó: alrededor de 10^34 ergs; las FRB convencionales comienzan con 100 veces más energía y pueden llegar hasta 10^43 ergs.

Si bien la actual investigación representa un gran paso para nuestra comprensión de las FRB, todavía hay suficiente incertidumbre para mantener entretenidos a los astrofísicos. De todas maneras, el hecho que un magnetar pueda producir algo similar a una FRB llama la atención.