Si hay un lugar fuera de la Tierra con el potencial de albergar vida ese es Europa, uno de los satélites de Júpiter. Ahora, un estudio ha sugerido que las regiones del «caos» podrían tener claves para esa posible vida en el océano bajo su corteza. El trabajo fue publicado en Astrophysical Journal Letters.
El equipo de la Universidad de Texas en Austin liderado por el geólogo Marc Hesse, sugiere que existen niveles abundantes de oxígeno en el océano subterráneo de Europa, tan altos como los de los océanos de la Tierra.
Oxígeno y salmuera
La corteza de hielo de Europa tiene unos 15 kilómetros de espesor y está hecha de hidrógeno y oxígeno. La radiación que se canaliza hacia la superficie de la luna desde el cercano Júpiter reacciona con el hielo, creando oxígeno. La interacción también crea otros compuestos con oxidantes (como el peróxido de hidrógeno).
El nuevo estudio realiza una simulación por computadora basada en la física de los procesos en la superficie de Europa. De acuerdo con los resultados, a medida que la capa de hielo de la luna se derrite parcialmente, crea un aguanieve conocida como salmuera.
La fuerza de este aguanieve que drena a través del hielo genera una «onda de porosidad» en el hielo, haciendo que sus poros se ensanchen temporalmente. Esto, a su vez, proporciona un camino para que la salmuera cargada de oxígeno se deslice desde la superficie hacia el océano.
“El transporte salobre parece ser una forma efectiva de llevar oxígeno a través del hielo, con el 86% del oxígeno absorbido en la superficie montando la ola hasta el océano», señala la investigación.
El terreno del caos
La tasa de entrega parece correlacionarse con breves momentos en la historia geológica de Europa cuando se forma el llamado «terreno del caos». Hay cinco regiones de «caos» conocidas y se cree que surgieron durante los períodos más cálidos cuando los bloques de hielo derretido se movieron en la superficie.
Sin embargo, aún no se sabe cuánto oxígeno está llegando al océano. El modelo asume una «amplia gama de niveles de oxígeno» que se entregan al océano de Europa a lo largo del tiempo. Las magnitudes varían por un factor de 10.000.
Solo el conjunto más alto de estimaciones tiene niveles de oxígeno en el océano de Europa similares a los de la Tierra. A pesar de ello, si el área cuenta con niveles de oxígeno más altos, podría existir algún tipo de organismo aeróbico justo debajo del hielo.
Estudios no relacionados del Telescopio Espacial Hubble han mostrado que el vapor de agua surge de las columnas. Esto agrega entusiasmo sobre las perspectivas de habitabilidad a medida que se espera la llegada de nuevas misiones como Europa Clipper de la NASA.
Europa Clipper
Los instrumentos de Europa Clipper incluyen una sonda de radar para buscar ingredientes que podrían ser cruciales para la vida en el satélite. Su investigación incluye sondear el océano, medir el espesor del hielo, y evaluar la estructura del hielo y sus propiedades superficiales, indica la NASA.
A pesar de ser una misión en órbita, la nave espacial es capaz de refinar las estimaciones de oxígeno en Europa. Aun así, puede ser necesaria una misión de aterrizaje para evaluar mejor qué tan viable sería el transporte salobre. Por ahora, toca esperar hasta la década del 30.