Un equipo de ingenieros de la Universidad de Massachusetts Amherst ha encontrado una manera de recolectar electricidad directamente del aire. Esta innovadora tecnología, denominada «efecto Air-gen genérico», podría revolucionar la forma en que pensamos acerca de la energía limpia. La investigación ha sido publicada en Advanced Materials.
El efecto Air-gen se basa en la premisa de que el aire contiene una gran cantidad de electricidad en sí mismo. Consideremos, por ejemplo, una nube, compuesta por gotas de agua cargadas. Cuando las condiciones son propicias, las nubes pueden generar rayos.
El desafío siempre ha sido cómo capturar de manera confiable esta electricidad. Por ello, el equipo de UMass Amherst buscó crear de manera artificial una versión en miniatura de una nube, capaz de producir electricidad de manera continua y predecible, permitiéndonos cosecharla.
El material
La clave de esta tecnología radica en los nanoporos presentes en los materiales. Cualquier material con nanoporos de menos de 100 nanómetros de diámetro puede recolectar electricidad generada por las gotas de agua presentes en el aire húmedo.
Estos nanoporos permiten que las moléculas de agua se desplacen desde la parte superior hasta el fondo del material, transfiriendo carga y generando acumulación eléctrica. Así, se crea un desequilibrio de carga similar al observado en las nubes que generan rayos.
El dispositivo Air-gen genérico está hecho de una película delgada de diferentes materiales, como celulosa, proteína de seda u óxido de grafeno. La delgadez de estas películas permite que se apilen para facilitar el escalado de los dispositivos Air-gen, haciéndolos más prácticos.
Además, al estar fabricados con diferentes materiales los dispositivos pueden adaptarse al entorno donde se van a utilizar. Por ejemplo, podrían diseñarse cosechadoras hechas de un tipo de material para ambientes de selva tropical y otro tipo de material para regiones más áridas.
Posibilidades
Si bien la tecnología se encuentra en sus primeras etapas, su potencial es enorme. La película de celulosa probada por el equipo demostró una salida de voltaje espontánea de 260 milivoltios en el entorno ambiental. Aunque un teléfono móvil requiere alrededor de 5 voltios de salida de voltaje, apilar las películas podría lograrlo.
El siguiente paso para el equipo es probar los dispositivos en diferentes entornos y trabajar en su ampliación. El efecto Air-gen es genuino y ofrece una forma novedosa de recolectar electricidad del aire como una fuente de energía sostenible y respetuosa con el medio ambiente, destaca el ingeniero Jun Yao de UMass Amherst.
En conclusión, este proyecto es un avance prometedor en el campo de la energía limpia, con un potencial significativo para nuestras soluciones energéticas y la construcción de un planeta más verde.