El Universo es inconmensurablemente grande, tan grande que incluso tiene agrupaciones de galaxias. De hecho, un equipo de astrónomos ha detectado un arco casi simétrico de galaxias a una distancia de 9.2 mil millones de años luz y, con 3.3 mil millones de años luz de diámetro, una de las estructuras más grandes jamás identificadas.
La investigación sobre esta inmensa estructura fue presentada en la 238ª reunión de la Sociedad Astronómica Estadounidense. Los astrónomos le pusieron el nombre de Arco Gigante y, si se confirma, se unirá al número creciente de estas estructuras gigantes.
“El creciente número de estructuras a gran escala por encima del límite de tamaño de lo considerado teóricamente viable es cada vez más difícil de ignorar”, dijo la astrónoma Alexia López de la Universidad de Central Lancashire.
Según los cosmólogos, se calcula que el límite teórico actual es de 1.200 millones de años luz, esto hace que el Arco Gigante sea casi tres veces más grande. “¿Puede el modelo estándar de cosmología explicar estas enormes estructuras en el Universo como simples casualidades? ¿O quizá ocurre algo más?”, se pregunta López.
Estructuras gigantescas
Nuestro modelo estándar de cosmología se basa en algo llamado Principio Cosmológico. Este establece que, en escalas suficientemente grandes, el Universo es homogéneo en todas las direcciones. Cada sección del Universo debería parecerse más o menos a cualquier otra sección del Universo, sin grandes inconsistencias.
Las estructuras a gran escala, de un tamaño superior a aproximadamente 1.200 millones de años luz, se considerarían simplemente una inconsistencia. Una o dos de estas inconsistencias podrían considerarse una coincidencia, pero cada vez van apareciendo más en los datos.
Por ejemplo, tenemos a la Gran Muralla Sloan, de alrededor de 1.500 millones de años luz de diámetro. El año pasado se anunció el descubrimiento de una estructura similar llamada South Pole Wall, de aproximadamente 1.370 millones de años luz de diámetro.
También está el grupo de galaxias Clowes-Campusano LQG que tiene 2 mil millones de años luz de diámetro, y el Gran Gran Grupo Quasar con sus 4 mil millones. La Gran Muralla Hércules-Corona Borealis es la más grande, con una extensión potencial de hasta 10 mil millones de años luz.
El descubrimiento
El Arco Gigante fue descubierto en datos del Sloan Digital Sky Survey. El equipo estudió la luz de las galaxias cuásares, las galaxias más brillantes del Universo, iluminadas por los agujeros negros supermasivos vorazmente activos en sus centros.
Cuando la luz de estas galaxias pasa a través del gas en el espacio intergaláctico, se absorben algunas longitudes de onda. Las líneas de absorción espectral generadas por dicho proceso pueden ser utilizadas para mapear la distribución de la materia en el Universo. Mediante este método, los investigadores notaron que las galaxias del Arco Gigante parecían estar agrupadas.
Un análisis más profundo parece casi confirmarlo. Los resultados del equipo tienen un nivel de confianza del 99,9997%, o 4,5 sigma. Esto no es suficiente para llegar al nivel de 5 sigma, de forma que todavía existe la posibilidad de que sea producto del azar; aun así, el hallazgo es interesante.
Si seguimos encontrando estructuras tan grandes en el Universo, podría significar que debemos revisar el Principio Cosmológico. “El cielo nocturno, al ser visto en una escala suficientemente grande, debe verse igual, sin importar la ubicación de los observadores o las direcciones en las que miren”, finalizó López.