La inteligencia artificial ha encontrado un antepasado ‘fantasma’ desconocido en el genoma humano, coincidente con restos de 50 mil años identificados hace unos años atrás.
Híbrido
En el 2018, científicos identificaron los restos de un antepasado humano desconocido que hallaron en la Cueva de Denísova, Rusia. Solo sabíamos que pertenecieron a una adolescente que vivió hace 50 mil años y que parecía ser un antepasado híbrido. Su madre era neandertal y su padre denisovano. Ahora la evidencia señala que ella no estaba sola. Al parecer, compartimos el viaje que nos llevó fuera de África con otras especies. Y en aquel viaje ocurrieron muchas cosas.
A medida que los humanos forjaron este camino hacia la masa continental de Eurasia, también trabajaron algunas otras cosas: la reproducción con homínidos antiguos y extintos de otras especies.
“Hace unos 80.000 años ocurrió el llamado Out of Africa, cuando parte de la población humana, que ya estaba formada por humanos modernos, abandonó el continente africano y emigró hacia otros continentes, dando lugar a todas las poblaciones actuales”, explica Jaume Bertranpetit de la Universitat Pompeu Fabra en España.
La travesía
Lo que ocurrió durante miles de años mientras recorríamos el continente africano por el norte hasta Euroasia, ha quedado registrado en nuestro ADN y en los restos que superaron el paso del tiempo. De las relaciones que se formaron y de los encuentros sexuales que se dieron, pensábamos que solo incluían a neandertales y denisovanos.
Sin embargo, el documento publicado en Nature Communications demuestra que eso no fue así. Los autores utilizaron algoritmos de IA para analizar el ADN aislado de los restos de individuos euroasiáticos. Apoyándose en una técnica estadística llamada inferencia bayesiana, pudieron encontrar evidencia de una población arcaica con la que los humanos modernos se cruzaron en la travesía. Los especialistas han denominado al suceso como «tercera introgresión».
«Esta población está relacionada con el clado Neanderthal-Denisova o divergió temprano del linaje Denisova», explican. Es decir, en la historia sexual de la humanidad mantuvimos relaciones con los neandertales, denisovanos y con una población producto de la mezcla de ambos.
Genoma divergente
Cabe recalcar que la investigación publicada en 2018 y la reciente no están vinculadas, pero el algoritmo coincide con el fósil híbrido encontrado años atrás. «Nuestra teoría coincide con el espécimen híbrido descubierto recientemente en Denisova, aunque todavía no podemos descartar otras posibilidades», dice Mayukh Mondal de la Universidad de Tartu en Estonia.
Lo hallado por el equipo es más que solo una explicación al proceso de introgresión olvidado hace mucho tiempo. Es un proceso vital que resultó en una parte de quiénes somos hoy.
«Pensamos que trataríamos de encontrar estos lugares de alta divergencia en el genoma, ver cuáles son neandertales y cuáles denisovanos, y luego analizar si estos explican el panorama completo», comentó Bertranpetit al Smithsonian. «Da la casualidad que si se restan las partes de neandertal y denisovano, todavía existe algo en el genoma que es muy divergente«.
Fuimos más.