Los terremotos son un tema de interés para la humanidad desde hace mucho tiempo. Todavía seguimos aprendiendo sobre cuáles son los mecanismos que gobiernan estos fenómenos. Ahora, un equipo de geólogos cree haber detectado lo que causa los terremotos masivos en la Tierra.
El estudio, que tiene por autora principal a Kirsty McKenzie de la Universidad Estatal de Pensilvania, fue publicado en Geochemistry, Geophysics, Geosystems.
Megathrust
Los terremotos megathrust ocurren en las zonas de subducción, donde una placa tectónica es empujada debajo de otra. Son particularmente comunes en los océanos Pacifico e Índico, y también pueden provocar tsunamis gigantes.
El nuevo estudio sugiere que un movimiento gradual y de deslizamiento lento, muy por debajo de la zona de subducción, podría ser clave para comprender cómo se desencadenan estos terremotos. Además, podría mejorar potencialmente los modelos de pronóstico para predecirlos mejor en el futuro.
Si bien los eventos de deslizamiento lento (SSE) no se dan en todas las zonas de subducción, pueden afectar la forma en que la presión se acumula en el subsuelo. De manera general, mueven energía en diferentes direcciones y no necesariamente siguen los movimientos de las placas.
«Por lo general, cuando ocurre un terremoto, encontramos que el movimiento es en la dirección opuesta a la que se han movido las placas, acumulando ese déficit de deslizamiento», dice el geocientífico Kevin Furlong , de la Universidad Estatal de Pennsylvania.
Movimientos en zonas de subduccion
En ese sentido, el equipo utilizó datos de estaciones GPS de alta resolución con el objetivo de analizar los movimientos a lo largo de la zona de subducción de Cascadia por unos años.
Un terremoto de magnitud 9 ocurrió aquí en 1700 y desde entonces los SSE han ocurrido por debajo de la zona de abducción. Son como «un enjambre de eventos», dicen los investigadores, y el patrón coincide con el registro de datos similares en Nueva Zelanda.
Aunque las SSE ocurren a kilómetros por debajo de la superficie, los movimientos pueden efectuar tanto el tiempo como el comportamiento de los megaterremotos. Los científicos piensan que los eventos más pequeños ocurren cada uno o dos años, pero podrían desencadenar algo mucho más serio.
“Hay zonas de subducción que no tienen estos eventos de deslizamiento lento, por lo que no tenemos medidas directas de cómo se mueve la parte más profunda de la placa de subducción”, dice Furlong.
¿Qué sigue?
Todavía queda más investigación por hacer, pero ahora los hallazgos ayudarán a informar los futuros modelos de terremotos. Por ejemplo, conocer la dirección de las fuerzas que liberarán los futuros terremotos es crucial para planificarlos.
Estos terremotos pueden ser muy impredecibles, por lo que cualquier información adicional que se pueda obtener con anticipación es importante.
«Más fundamentalmente, no sabemos qué desencadena el gran terremoto en esta situación», dice la geocientífica Kirsty McKenzie , de la Universidad Estatal de Pensilvania. «Cada vez que agregamos nuevos datos sobre la física del problema, se convierte en un componente importante».