Climatólogos estadounidenses han descubierto un fenómeno climático raro: un lago atmosférico. El fenómeno se encontró sobre el Océano Índico occidental y fue detectado 17 veces en la misma región durante un período de 5 años. Los resúmenes del informe fueron publicados en el sitio web de la Unión Geofísica Estadounidense.
El vapor de agua en la atmósfera es capaz de moverse rápidamente a grandes distancias mientras mantiene su concentración. A este fenómeno se le llama río atmosférico y es propio de las latitudes tropicales, desde donde la humedad se transfiere a latitudes medias. Los ríos atmosféricos se caracterizan por ser corredores bien definidos de movimiento de humedad y por tener una alta tasa de transferencia horizontal.
Lagos atmosféricos
Ahora los climatólogos Brian Mapes y Wei-Ming Tsai de la Universidad de Miami descubrieron y describieron recientemente “lagos atmosféricos” en el Océano Índico. Analizaron los datos climáticos de la región para el período de 2014 a 2018 y notaron acumulaciones aisladas de vapor de agua que aparecen periódicamente. Estas siempre comienzan con pequeñas corrientes de aire húmedo.
“En contraste con los ‘ríos atmosféricos’ de vapor que contienen lluvia, que son contiguos desde la fuente hasta la costa en un instante, a estos cuerpos de agua desconectados y a la deriva los llamamos ‘lagos atmosféricos’”, explican los investigadores.
Estos arroyos fluyen rápidamente desde el lado occidental del monzón del sur de Asia, independientemente de la temporada. Luego colapsan en un lago separado, que flota lentamente a lo largo del ecuador, a pesar que la velocidad del viento es cercana a cero. Los autores denominan a este tipo de movimiento como autopropulsado y aún no comprenden qué vientos mueven el lago.
“Los vientos que llevan estas cosas a la costa son tan tentadores y delicadamente cercanos al cero [la velocidad del viento], que todo podría afectarlos”, dice Mapes. “Ahí es cuando necesitas saber si se autopropulsan o son impulsados por patrones de viento a una escala mucho mayor que pueden cambiar con el cambio climático”.
Durante un período de cinco años, los climatólogos descubrieron 17 lagos que transportaban agua desde la región del Indo-Pacífico a las áridas tierras bajas de la costa de África Oriental. Una vez en esa área, los lagos arrojaban el agua en fuertes lluvias.
Lagos gigantes
Según las estimaciones de los autores, el volumen del vapor de agua en el lago durante la condensación puede formar un charco con un diámetro de unos mil kilómetros y una profundidad de varios centímetros. Asimismo, destacan que el lago retiene la humedad durante más de 6 días, incluso con caídas de temperatura y presión, que suelen provocar precipitaciones.
Los científicos planean estudiar en detalle las causas de los lagos atmosféricos y comprender el mecanismo de su movimiento. Señalan que la climatología de las precipitaciones en esta zona está bien estudiada a escala mensual. Sin embargo, se requiere un análisis diario detallado, el cual proporcionará más información sobre el nuevo fenómeno climático.
“Es un lugar que está seco en promedio, así que cuando ocurren estos [lagos atmosféricos], seguramente son muy importantes”, comenta Mapes. Para eso, apelará al conocimiento local. “Los marineros observadores acuñaron la palabra monzón para los patrones de viento, y seguramente también notaron estas tormentas ocasionales”, finalizó.