Después de una década de estudio, el mayor descubrimiento de nuevos mamíferos en 90 años ha sido publicado

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Después de una década de estudio, el mayor descubrimiento de nuevos mamíferos en 90 años ha sido publicado

Describir nuevas especies no es algo sencillo. Por ejemplo, en Sulawesi, científicos examinaron la morfología de 1368 especímenes y obtuvieron datos moleculares como secuencias de ADN mitocondrial de 851 especímenes para demostrar la existencia de 21 especies de musarañas en la isla, de las cuales solo siete fueron reconocidas previamente.

Después de una década de estudio, los investigadores detallaron 14 nuevas especies. Este es el mayor descubrimiento de nuevos mamíferos enumerados en un solo artículo desde 1931.

Musarañas de Sulawesi

Son 14 nuevas especies endémicas del género Crocidura. Las musarañas son un grupo de mamíferos placentarios que se caracterizan por sus pequeños ojos y un largo hocico con bigotes muy sensibles. Poseen una característica muy inusual para los mamíferos: algunas especies de musarañas son venenosas. Además, son famosas por derribar animales como escorpiones y serpientes.

La diversidad de musarañas en Sulawesi es tres veces mayor que en cualquier otra isla de la región. Esto muestra que las estimaciones anteriores, basadas principalmente en especímenes de museos, estaban muy lejos de la marca.

«Por lo general, descubrimos una nueva especie a la vez, y hay una gran emoción que proviene de ello. Pero en este caso, fue abrumador porque durante los primeros años, no pudimos averiguar cuántas especies había«, dice Jake Esselstyn, bióloga de la Universidad Estatal de Luisiana.

Sulawesi, en español Célebes, es una isla relativamente grande y montañosa, de unos 174.600 kilómetros cuadrados de superficie, tropical y con una variedad de hábitats. Este tipo de isla alberga las condiciones ideales para que ocurra una explosión de biodiversidad. Los investigadores explican que las diversas elevaciones, que crean ‘islas’ aisladas de montañas boscosas tropicales en un mar de hábitat bajo y seco, contribuyeron a la gran cantidad de especies de musaraña.

Las nuevas especies

Todos los análisis moleculares que realizaron los investigadores sirvieron para clasificar las nuevas especies en cinco categorías. Un grupo de cola larga, un grupo de roditis, otro grupo de cuerpo pequeño, uno de cola gruesa y uno ordinario.

«La disponibilidad de una gran serie de especímenes con datos genéticos nos permitió detectar diferencias sutiles en los rasgos cuantitativos y cualitativos que de otro modo podrían haber pasado desapercibidos«.

Con ello, se han identificado las siguientes especies: Crocidura microelongata, C. quasielongata, C. pseudorhoditis, C. australis, C. pallida, C. baletei, C. mediocris, C. parva, C. tenebrosa, C. brevicauda, ​​C. caudicrassa, C. normalis, C. ordinaria y C. solita.

La taxonomía como base en la investigación biológica

Comprender las diferencias entre especies y descubrir cuántas existen es esencial para la precisión de otras investigaciones científicas, desde mapear la evolución de un animal hasta comprender el desarrollo de las comunidades animales.

«La taxonomía sirve como base de gran parte de la investigación biológica y el esfuerzo de conservación», señala Esselstyn. «Cuando no sabemos cuántas especies hay o dónde viven, nuestra capacidad para comprender y preservar la vida es muy limitada«.

«Es esencial que documentemos y nombremos esa diversidad. Si podemos hacer descubrimientos de tantas especies nuevas en grupos relativamente conocidos como los mamíferos, imagínense cómo es la diversidad indocumentada en organismos menos conspicuos«.