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NASA: la actividad sísmica lunar pondría en riesgo futuras misiones

Mosaico de la cámara del Orbitador de Reconocimiento Lunar (LROC) y de la cámara de ángulo estrecho (NAC) del grupo Wiechert de escarpes lobulados (flechas que apuntan hacia la izquierda) cerca del polo sur lunar. Un escarpe de falla de empuje atravesó un cráter degradado de aproximadamente 1 kilómetro de diámetro (flecha que apunta hacia la derecha). / NASA/LRO/LROC/ASU/Institución Smithsonian

¡La Luna está encogiéndose! Este fascinante fenómeno ocurre aproximadamente 45 metros cada cientos de millones de años y es el resultado del enfriamiento prolongado de su interior. Aunque este cambio es gradual, tiene implicaciones significativas en términos de actividad tectónica y sismológica.

Una nueva investigación de la NASA, ha descubierto que este encogimiento estaría generando deslizamientos de tierra y terremotos. El problema es que los movimientos se producen cerca del Polo Sur lunar, una zona de interés para futuras misiones humanas y posibles asentamientos.

 

Zona de riesgo

La NASA, en su campaña Artemis, planea enviar astronautas a la región del Polo Sur lunar, un área ahora reconocida como geológicamente activa. Los estudios, respaldados por datos del Orbitador de Reconocimiento Lunar (LRO) y las sismometrías de las misiones Apollo, operativas hasta 1977, revelaron la presencia de fallas de empuje jóvenes y la ocurrencia de sismos lunares poco profundos. Algunos de estos sismos han sido lo suficientemente fuertes como para provocar deslizamientos de regolito.

Este descubrimiento es crucial para la planificación de futuras misiones lunares. Los investigadores, liderados por Tom Watters del Smithsonian Institution, modelaron la actividad sísmica en la región e identificaron que los terremotos lunares poco profundos pueden generar fuertes sacudidas en el suelo.

Dichos sismos ocurren tanto por eventos de deslizamiento en fallas existentes como por la formación de nuevas fallas de empuje, resultado de la contracción global en curso de la Luna. Estas se vuelven notorias por las escarpas lobuladas, representando un factor importante a considerar al planificar la ubicación y estabilidad de futuras bases permanentes en la Luna.

 

Diagrama del proceso de formación de fallas lunares. / Arizona State University/Smithsonian

 

Importancia 

La investigación indica que la superficie lunar, compuesta de grava seca y polvo, es especialmente propensa a la agitación y los deslizamientos de tierra debido a los impactos de asteroides y cometas a lo largo de miles de millones de años.

Los hallazgos subrayan la importancia de considerar la seguridad de los astronautas y la infraestructura en futuras misiones lunares. Sin embargo, es crucial seguir recopilando datos sísmicos no solo en el Polo Sur, sino a nivel global. La próxima misión Farside Seismic Suite ampliará las mediciones hechas durante las misiones Apolo.

La gestión de los riesgos sísmicos en la Luna es ahora más crucial que nunca para salvaguardar a los astronautas, el equipo y la infraestructura, especialmente con la inminente misión Artemis III en el horizonte. Serán necesarias estructuras capaces de resistir la actividad sísmica lunar y proteger a las personas de áreas potencialmente peligrosas.

Los datos obtenidos por el LRO y el análisis de las fallas de empuje son ejemplos fundamentales de cómo la investigación actual está contribuyendo a planificar nuestro regreso a la Luna de manera segura y eficiente. El estudio fue publicado en The Planetary Science Journal

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