Icono del sitio Robotitus

Los telescopios de rayos gamma podrían ayudarnos a captar más ondas gravitacionales

Girando a 500 km sobre la tierra, el Telescopio de Área Grande Fermi recolecta rayos gamma de púlsares de milisegundos. Daniëlle Futselaar/MPIfR

Los rayos gamma se convertirían en la nueva fuente para observar ondas gravitacionales, además de la interferometría láser y las ondas de radio. El trabajo que estudia esta posibilidad fue publicado en Science

Un nuevo método

Las ondas gravitacionales se forman cuando chocan contra objetos masivos como los agujeros negros, creando ondas en el espacio-tiempo que atraviesan la Tierra. Actualmente los observatorios como LIGO y Virgo detectan las colisiones que resultan en ondas gravitacionales. Sin embargo, solo pueden ver un evento a la vez, a menudo con meses de diferencia.

Ahora, podríamos tener una nueva forma de encontrar ondas gravitacionales. Un equipo de astrofísicos liderado por Matthew Kerr, del Laboratorio de Investigación Naval de EE.UU., sugiere que será posible buscar las mencionadas ondas en púlsares (estrellas de neutrones que giran rápidamente y pulsan a intervalos regulares) gracias a las observaciones del Telescopio Espacial de Rayos Gamma Fermi de la NASA. Este telescopio observa el universo en rayos gamma, la forma de luz más energética.

«Nos ha sorprendido lo bueno que es para detectar los tipos de púlsares que necesitamos para buscar estas ondas gravitacionales”, señaló Kerr en un comunicado. “¡Más de 100 hasta ahora!», afirmó de manera entusiasta. 

Rayos Gamma

Los púlsares giran a intervalos muy precisos, los cuales pueden ser rastreados desde la Tierra debido a los rayos que emiten. A medida que las ondas gravitacionales inundan un púlsar, podrían alterar sutilmente su tiempo. Los científicos creen que conseguirán observar esos cambios sutiles y así rastrear las ondas gravitacionales que los crearon.

Tradicionalmente, los astrónomos encuentran púlsares utilizando radiotelescopios para buscar ondas de radio en el cielo. Pero el gas y el polvo que llenan el cosmos interfieren con ellas; muchas terminan siendo absorbidas en el camino.

Los rayos gamma, por el contrario, son la energía más alta de cualquier onda en el espectro electromagnético, así que pasarán sin problema. No obstante, hasta este nuevo estudio, los astrofísicos nunca habían usado rayos gamma para rastrear púlsares.  

Importancia 

Los resultados pueden significar que hay una forma nueva y más poderosa de encontrar púlsares y, a su vez, detectar ondas gravitacionales. Los investigadores esperan que las mejoras futuras hagan a estos métodos de detección aún más sensibles. 

«La capacidad sin precedentes de Fermi para cronometrar con precisión la llegada de los rayos gamma y su amplio campo de visión hacen posible esta medición», señaló Judith Racusin, científica adjunta del proyecto Fermi en el Centro de Vuelo Espacial Goddard de la NASA.

«Desde su lanzamiento, la misión nos ha sorprendido constantemente con nueva información sobre el cielo de rayos gamma”, agregó Racusin. Ahora, todos estamos ansiosos por el próximo descubrimiento sorprendente

Salir de la versión móvil