Hace algunos días se viralizó la noticia del primer hallazgo de microplásticos en el torrente sanguíneo humano; y, como un recordatorio de la necesidad de reducir nuestro consumo de plástico, otra investigación advierte que las partículas sintéticas han llegado a nuestros pulmones.
Partículas muy grandes para estar ahí
Este estudio ha descubierto 39 partículas microplásticas en 11 de 13 muestras analizadas de tejido pulmonar. Entre la gran cantidad de polímeros encontrados, destaca el polietileno, el más común y químicamente simple. Su bajo precio y simplicidad de fabricación, permiten que su producción alcance las 80 millones de toneladas anuales en todo el mundo.
De ahí que se use para casi todo, desde bolsas, empaques, pinturas, juguetes, neumáticos y hasta en fibras de nylon de ropa sintética.
Si bien solo se observaron pequeñas cantidades, estos microplásticos estaban presentes en la totalidad de los pulmones. Cuanto más profundo era el tejido pulmonar, mayor era la contaminación. A tal profundidad, las partículas de plástico resultaron ser inesperadamente grandes.
Décadas atrás, se pensaba que solo las partículas menores a 3 μm de diámetro (0.003 mm) podían ingresar a la región alveolar del pulmón. Sin embargo, la literatura científica reciente establece el diámetro de los conductos alveolares en 540 μm (0.54 mm) con una longitud de 1410 μm (1.41 mm).
Es por eso que el tamaño de las partículas recién halladas en los tejidos vivos sorprende tanto a los especialistas. Estamos hablando de microplásticos con aproximadamente 2475 (2.47 mm) μm de largo y hasta 88 μm (0.088 mm) de ancho.
«Son (partículas) demasiado grandes para estar presentes, pero de todos modos lo están», dice la especialista Laura Sadofsky.
«Esto es sorprendente ya que las vías respiratorias son más pequeñas en las partes inferiores de los pulmones, y habríamos esperado que las partículas de estos tamaños se filtraran o quedaran atrapadas antes de llegar hasta los alveolos«.
Aire contaminado
Hace unos días, la OMS publicó un reporte sobre la calidad de aire, en el cual se utilizaron parámetros como la cantidad de material particulado y dióxido de nitrógeno, y nos advirtió que el 99% de los humanos ya respiramos aire contaminado.
El nuevo hallazgo de microplásticos en los pulmones sugiere que podríamos estar respirando partículas más grandes de las que viajan como materia sólida en el aire. Es decir, la inhalación es la ruta regular de la exposición a microplásticos.
Lamentablemente, de momento solo se ha podido confirmar la presencia de un microplástico relativamente grande en un sitio donde no se esperaba debido a su tamaño. No sabemos aún cuáles son los verdaderos efectos de los microplásticos en nuestros pulmones.
«Estos datos proporcionan un avance importante en el campo de la contaminación del aire, los microplásticos y la salud humana», señala Sadofsky. «La caracterización de los tipos y niveles de microplásticos que hemos encontrado puede informar sobre condiciones realistas para experimentos de exposición en laboratorio con el objetivo de determinar cuáles son los impactos de los microplásticos en la salud».