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Astrónomos resuelven el misterio de los quásares, los objetos más poderosos del Universo

quásares

La impresión de este artista muestra el aspecto del distante quásar P172 + 18 y sus radio-jets. (ESO / M. Kornmesser)

El Universo, con toda su vastedad, tiene un elemento que nos maravilla por su brutal belleza: las galaxias quasar. Alimentadas por agujeros negros supermasivos activos que consumen material a velocidades asombrosas, emiten algunas de las luces más brillantes del cosmos. Ahora, un estudio publicado en Monthly Notices of the Royal Astronomical Society ha encontrado un secreto que podría explicar su origen.

El trabajo dirigido por el astrofísico Jonny Pierce de la Universidad de Hertfordshire, Reino Unido indica que nuestra propia Vía Láctea podría transformarse en un quásar tras su eventual fusión con la galaxia de Andrómeda. Lamentablemente, este espectáculo ocurrirá dentro de unos miles de millones de años, por lo que ningún humano podrá presenciarlo.

 

Los quásares 

Los quásares son considerados uno de los fenómenos más extremos del Universo, siendo agujeros negros supermasivos que acumulan material a un ritmo increíble.

La materia que rodea a un agujero negro se arremolina a altas velocidades, lo que produce una intensa fricción y gravedad. Este proceso genera temperaturas tremendamente altas y hace que el material emita luz en todo el espectro. Aunque no podemos observar al agujero negro de manera directa, la actividad a su alrededor puede ser espectacular.

Sin embargo, la fuente del material que alimenta los quásares ha sido desconocida hasta ahora. Averiguar sobre los flujos de material alrededor de los centros galácticos de las galaxias quásares ha resultado ser un desafío. Dichas estructuras suelen ser demasiado pequeñas para distinguirse a grandes distancias y sus centros emiten demasiada luz para poder observar detalles más finos.

 

El estudio

Pero Pierce y su equipo realizaron una investigación detallada de 48 quásares cercanos, ubicados a unos 3.500 millones de años luz, y los compararon con 100 galaxias similares que no mostraban actividad de quásar.

Así, descubrieron que aproximadamente dos tercios de los quásares en su muestra indicaban signos de perturbación gravitacional debido a un encuentro con otra galaxia. Esto representa tres veces la tasa de perturbación encontrada en las galaxias que no son quásares.

Cuando dos galaxias chocan, grandes cantidades de gas son atraídas gravitacionalmente hacia el agujero negro supermasivo, proporcionando suficiente material para alimentarlo.

Curiosamente, los autores observaron muchos quásares perturbados aún en su fase previa a la fusión. Esto podría deberse a que los flujos de gas hacia un centro galáctico son capaces de desencadenar la actividad del quásar mucho antes de que los dos núcleos galácticos se fusionen.

 

Importancia

Aunque las interacciones entre galaxias parecen ser el desencadenante más común de la actividad de los quásares, también existen otros mecanismos que podrían activarlos. De hecho, la presencia de galaxias de disco inalteradas en la muestra sugiere la posibilidad de que la actividad de los quásares sea causada por procesos normales.

Este innovador estudio arroja luz sobre el misterioso mundo de las galaxias quásares. Además, ofrece información valiosa sobre su formación y el papel de las colisiones galácticas en su intensa actividad. 

A medida que continuamos explorando las maravillas de nuestro Universo, nos acercamos cada vez más a comprender la intrincada danza de los cuerpos celestes y la miríada de procesos que impulsan su evolución

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