Los magnetares son una forma de estrella de neutrones tan extraña, que solo hemos descubierto 24 hasta la fecha. Ahora, según un reporte publicado en Astronomers Telegram, un nuevo descubrimiento podría elevar el número total de magnetares confirmados a 25.
El último 3 de junio, una breve explosión de rayos X cerca del plano galáctico llamó la atención del telescopio Swift Burst Alert (BAT). La observación y el análisis de seguimiento parecen confirmar que fue emitido por un magnetar previamente desconocido, ahora llamado Swift J1555.2-5402.
La nueva incorporación tiene el potencial de aumentar enormemente nuestra comprensión de estos misteriosos objetos.
Muy pocos magnetares
Los magnetares son un tipo muy raro de estrella de neutrones, que son los núcleos colapsados de estrellas que comenzaron con masas entre 8 y 30 veces la del Sol. Cuando estas estrellas se convierten en supernovas y expulsan su material exterior, sus núcleos colapsan.
Luego de eso, se convierten en algunos de los objetos más densos del Universo: hasta aproximadamente el doble de la masa del Sol, agrupados en una esfera de solo 20 kilómetros de diámetro. Esto los convierte en una especie de celebridad cósmica.
Además, como sugiere su nombre, tienen un campo magnético increíblemente poderoso, alrededor de 1.000 veces más poderoso que el de una estrella de neutrones normal y un cuatrillón de veces más poderoso que el de la Tierra.
Los magnetares son estrellas difíciles de detectar, lo que las hace difíciles de entender. Hasta la fecha, solo se han confirmado 24, con otros 6 candidatos en espera. Esto significa que hay muchas cosas que no sabemos sobre ellos, por ejemplo, cómo desarrollaron esos espectaculares campos magnéticos.
Swift J1555.2-5402
Hace poco un descubrimiento catapultó a los magnetares al centro de atención. Una de estas misteriosas estrellas fue captada emitiendo un tipo de señal de radio potente llamada ráfaga de radio rápida. Estas señales, también llamadas FRB, solo se había detectado desde fuentes fuera de la Vía Láctea, y cuya procedencia se desconocía.
Los magnetares son turbulentos. A medida que la gravedad intenta mantener unida a la estrella, el poderoso campo magnético ejerce una fuerza hacia afuera, distorsionando la forma de la estrella. Esto conduce a una tensión continua entre las dos fuerzas, que ocasionalmente produce gigantescos terremotos y destellos de magnetar gigantes.
Justamente eso pasó con Swift J1555.2-5402: reveló su presencia con un estallido de radiación X. Luego, se realizaron observaciones de seguimiento utilizando el Telescopio Explorador de Composición Interior de Estrella de Neutrones (NICER) de la NASA y el Telescopio Swift de rayos X, ambos instrumentos espaciales en órbita terrestre.
Swift identificó una nueva fuente de rayos X en las coordenadas del estallido, y NICER detectó pulsaciones coherentes características de un magnetar. Esto confirmó que el estallido corto fue efectivamente emitido por un nuevo magnetar.
Sin embargo, aún está pendiente un análisis completo para aprender más sobre este objeto recién descubierto.