Jeff Bezos logró su sueño de ir al espacio. Su empresa espacial privada Blue Origin completó con éxito el primer vuelo suborbital tripulado con el sistema reutilizable New Shepard. Junto a Bezos, otros 3 turistas han alcanzado altura suborbital, incluyendo al astronauta más joven y al de mayor edad del mundo.

Blue Origin comenzó a desarrollar el sistema New Shepard desde el 2006, diseñado para vuelos turísticos suborbitales. En estos los pasajeros alcanzan una altitud de más de 100 kilómetros, más allá de la línea Karman, es decir que están en el espacio. 

El sistema es autónomo y reutilizable y consta de un cohete de una sola etapa y una cápsula de pasajeros de seis asientos. La compañía ya ha realizado quince vuelos de prueba, probado el sistema de rescate de emergencia y el sistema de aterrizaje de precisión.  

El primer vuelo

Como infrormamos ayer, el primer vuelo tripulado, llamado NS-16, se realizó con el cuarto modelo del sistema NS-4. Los ocupantes de la nave fueron el propio fundador de Blue Origin Jeff Bezos, su hermano Mark Bezos, Wally Funk de 82 años y el adolescente Oliver Daemen.

Funk es piloto y en el año 1961 fue seleccionada para el programa de mujeres astronautas (conocido como «Mercury-13»), pero nunca logró ir al espacio. Por otro lado, el estudiante Daemen tiene 18 años y su vuelo fue pagado por su padre multimillonario y fundador de la empresa de inversión holandesa Somerset Capital Partners. Así, el resultado del vuelo fue la aparición de los astronautas más jóvenes y mayores del mundo.

El vuelo en sí comenzó a las 8:00 de la mañana hora local y duró unos 11 minutos. Inicialmente, el cohete se lanzó verticalmente hacia arriba y comenzó a acelerar A los tres minutos se separó una cápsula que, por inercia, siguió ganando altura y cruzó la línea Karman, la barrera de los 100 kms de altura. 

A esa altura los pasajeros pudieron permanecer durante 3-4 minutos en gravedad cero. «Blue Control, Bezos. ¡El mejor día de mi vida!» dijo Bezos mientras volaba. Luego, el cohete aterrizó en una plataforma a tres kilómetros del lugar de lanzamiento. La cápsula primero utilizó tres paracaídas y realizó un aterrizaje suave a una velocidad de unos 45 centímetros por segundo. No se usaron los sistemas de retropropulsión.

Más allá del primer vuelo, se sabe relativamente poco sobre los planes turísticos futuros de Blue Origin. A diferencia de Virgin Galactic, Blue Origin no ha comenzado oficialmente a vender boletos y el adolescente Daemen ganó su lugar a través del proceso de subasta. Aun así, la compañía planea dos vuelos más este año, y muchos más para el 2022.

La semana pasada, Richard Branson, el dueño de Virgin Galactic, fue lanzado al límite del espacio. Con estos dos vuelos, se abre una nueva era del turismo espacial, algo que muchas personas están criticando, no sin justicia, por el momento en el que vive la humanidad. Mientras muchos sufren por los estragos de la pandemia, algunos multimillonarios van al espacio por diversión. En todo caso, todo esfuerzo por empujar las fronteras del conocimiento, servirán para la ciencia.