Tras caminar sesenta kilómetros por la densa selva de Yucatán, un equipo de arqueólogos realizó un emocionante descubrimiento: una antigua ciudad maya perdida que no había sido registrada anteriormente.
El arqueólogo y líder del equipo, Ivan Šprajc, de la Academia de Ciencias y Artes de Eslovenia, describe el asombro que les causó el sitio: «La mayor sorpresa resultó ser el área ubicada en una península elevada, rodeada de extensos humedales. Su núcleo monumental abarca más de 50 hectáreas y cuenta con varios edificios grandes, incluyendo diversas estructuras piramidales de más de 15 metros de altura«.
Columna de piedra
Esta ciudad ha sido llamada Ocomtún, que significa «columna de piedra». El sitio en expansión incluye plazas, grandes edificios de estilo piramidal, columnas de piedra y otras estructuras dispuestas en patrones de anillos concéntricos. Lamentablemente, gran parte de la ciudad no ha resistido el paso del tiempo.
Antes de llevar a cabo el trabajo de campo, los investigadores realizaron escaneos aéreos LIDAR en toda el área. Esta tecnología utiliza rayos láser para detectar edificios que de otra manera estarían ocultos por los árboles y la vegetación.
Los bosques tropicales de esta región son vastos, con alrededor de 3000 kilómetros cuadrados de selva prácticamente inexplorada. Su follaje denso ha protegido los secretos ocultos en su interior, imposibilitando el acceso a estas zonas.
Secretos en la selva
Según Šprajc y sus colegas, la ciudad habría sido un centro local importante entre 250 y 1000 d.C., durante la era Clásica maya. Los mayas se destacaron en Mesoamérica por sus avances en arquitectura, cultura, sistemas de calendario y matemáticas.
El colapso de su civilización, ocurrido en el siglo IX d.C., no deja de intrigar a todo el mundo. Los especialistas especulan que una combinación de factores, como conflictos internos, sequías y otros cambios ambientales, contribuyeron a su declive. La última ciudad maya, Tayasal, cayó en el sigo XVII ante los invasores españoles, marcando el final del poderío político independiente de los mayas en la región.
El uso de tecnologías como el LIDAR nos está permitiendo encontrar cada vez más asentamientos mayas que permanecían ocultos. Estos descubrimientos nos recuerdan que, a pesar del acceso global a imágenes satelitales, aún hay muchos secretos que esperan ser revelados.
Fuente: Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH).
